domingo, 1 de noviembre de 2009

Para preservar un trébol


Hay que seguir el corazón dicen por ahí, sin embargo es sano tomar decisiones con la cabeza. Dicen que la distancia es el olvido, pero también puede ser el mejor rescate, porque con distancia se curan las heridas, se emprenden nuevos rumbos, se comprenden muchas cosas. Y porque quiero preservar ese trébol es que es necesario poner distancia, porque mis toxinas te estaban oxidando, te quitaban lo verde de tus hojas, y también las mías se marchitaban. Se que no saldrás definitivamente de mi jardín, y espero yo no salir del tuyo, es sólo que cuando las cuatro hojas vuelvan a aparecer lo harán con unas raíces sanas, limpias, unas raíces que alimentan y no que asfixian y que poco a poco acabarían con el trébol. Hoy cierro esta primera etapa de la vida de estas plantas, agradecida por los buenos momentos que han sido muchos, con una nostalgia, sí, por que no decirlo, una nostalgia por aquellos buenos tiempos, cuando no era todo tan complicado, espero que sigas creciendo que te conviertas en el trébol grande y fuerte que sé que eres. 1234

No hay comentarios: